INFO - Cactus San Pedro



San Pedro.

Cuenta la historia, que previa a la llegada de los españoles los indígenas locales, usaban el cactus ''achuma'' en celebraciones religiosas, y rituales de sanación. Después de haber sido envagelizados por los colonos, disidieron cambiar su nombre por el de cactos ''San Pedro''
El motivo del cambio fue bastante sencillo. Si el apóstol San Pedro eran quien tenia las llaves del cielo, entonces se asemejaba al cactus el cual les abría las puertas del cielo.
Se han encontrado subterraneos en templos peruanos, tallados dibujos de hombres tigre, sosteniendo la planta sagrada entre sus manos.
El San Pedro se cultivaba en las inmediaciones de la vivienda, pues se creía que los espiritus de la planta protejerían a sus moradores. Los rituales de cosecha se llevaban a cabo de noche y en prelunio acompañado de resos y canticos. Se pretendía que la planta favoreciera al curandero y - a traves de las visiones logradas con el consumo - procediera a sanar a la victima enferma.


Consumo

En estado natural los gajos del peyote se mastican solos o en compañía de algún líquido, preferentemente jugos cítricos pues su sabor es bastante amargo. Cuando el cactus se deshidrata retiene la mescalina indefinidamente y puede reducirse a polvo para prepararse en té o añadirse a un jugo de fruta. El San Pedro se consume en polvo debido a la consistencia poco agradable del cactus y la amargura de su sabor. Además las mayores concentraciones de mescalina se hallan en la piel verde del cactus, que se pela cuidadosamente y se seca a bajas temperaturas para después reducirse a polvo. La mescalina pura se administra por vía oral o intravenosa. Los efectos del peyote o del San Pedro ingeridos crudos o secos, al igual que el de la mescalina por vía oral, comienzan entre los 60 y 90 minutos después de la ingestión y duran entre 7 y 12 horas. Los efectos de la mescalina inyectada comienzan entre los 10 y los 20 minutos. La mescalina posee casi la misma estructura química que la noradrenalina, por lo que actúa instalándose en los receptores de ésta ocasionando alteraciones en la conciencia y en la percepción, principalmente a nivel visual. Aunque gran parte de los efectos de estas cactáceas se deben a la mescalina, otros alcaloides contribuyen a que la experiencia con peyote o San Pedro sea diferente a la de la mescalina pura; la peyotina, por ejemplo, presenta efectos narcóticos cuando se consume de forma aislada.